Anteriormente, hemos hablado en el Búho Blog acerca de las ventajas del uso de la tecnología en la compra de medicamentos, y como esta puede mejorar la accesibilidad a los pacientes al momento de enfrentarse a la compra, permitiendo, entre otros, que estos ahorren dinero y reciban sus productos en la puerta de su casa.
Sin embargo, aún hay un eslabón perdido en esta cadena, y tiene relación en cómo logramos llevar estas ventajas antes nombradas al momento justo en el cual el paciente necesita comprar sus medicamentos, es decir, cuando este recibe por primera vez su receta.
Para que el paciente sepa qué medicamentos son los indicados para solucionar su dolencia, este debe interactuar con el sistema de salud, de manera que un profesional lo evalúe y, en caso de ser necesario, le prescriba un conjunto de medicamentos que considere adecuado para tratar esa dolencia en particular. Si ilustramos el flujo anterior como un listado de etapas, se vería de la siguiente manera:
- Primera atención: El paciente acude a un centro de salud, esperando ser atendido por un profesional. Este lo evalúa y, según sus conclusiones, puede ser derivado a un especialista, o bien, solicitar exámenes complementarios para descartar posibles enfermedades y así tener un diagnóstico más acertado.
- Exámenes: esta vez, el paciente agenda una hora para ser examinado, según las instrucciones dadas por su doctor. En el mejor de los casos, podrá ser examinado en un mismo día, y deberá esperar por los resultados.
- Segunda atención: Para este punto, el paciente ya cuenta con los resultados de sus exámenes, y se dirige donde el profesional de la salud que los solicitó. Idealmente, los resultados de los exámenes fueron concluyentes, por lo cual el médico realiza el diagnóstico, y junto con esto, le prescribe una receta con los medicamentos necesarios para que pueda tratar esta dolencia.
- Compra de medicamentos: Recién en este punto, el paciente cuenta con su receta médica, y debe comprar sus medicamentos para dar comienzo a su tratamiento. Dado el largo flujo por el que tuvo que pasar, es muy probable que este se acerque a la farmacia más cercana, no compare precios, y compre todos sus medicamentos en un mismo lugar.
Pero, ¿qué pasaría si logramos optimizar el último punto, de manera que el paciente no solo ahorra dinero, sino que no tenga que acercarse a la farmacia ni hacer filas? En Búho estuvimos pensando arduamente en esta pregunta, y por fin dimos con una respuesta: insertarnos en el ecosistema de salud. En otras palabras, lo que buscamos es acercarnos a distintos actores del sistema de salud: centros médicos, empresas de telemedicina, clínicas, etc… para solucionar este problema en conjunto.
Lo que proponemos es simple pero efectivo: al momento de entregar una receta, incluir un código QR o link, de manera que el paciente pueda ingresar fácilmente a un carro de compras con distintas alternativas para cada medicamento que le fué prescrito, de manera que pueda elegir el laboratorio que más le guste. Así, una vez que tenga todo su carro armado, en Búho nos encargaremos de comparar los precios de cada medicamento que seleccionó, para que este reciba los medicamentos al mejor precio y sin necesidad de hacer filas.
Por su parte, los centros de salud estarían mejorando la experiencia de sus pacientes, acompañándolos en el eslabón perdido dentro del flujo de atención: la compra de medicamentos. A su vez, un ahorro en la compra de dichos medicamentos, no solo tiene como consecuencia un alivio directo al bolsillo de las familias, sino también una mejora en la adherencia de los pacientes al tratamiento prescrito por el profesional de la salud.
Actualmente, ya son más de 10 los centros de salud con los cuales estamos trabajando codo a codo para mejorar la experiencia de los pacientes a lo largo del flujo, simplificando la manera en que estos compran sus medicamentos. Muchos de estos partners ofrecen también otras alternativas aparte de Búho, pero estamos confiados que, gracias a nuestra tecnología de comparación de precios, podemos entregar un carro de compra óptimo al paciente, de manera que ahorre todo lo posible en su tratamiento.
Si perteneces a un centro de salud y llegaste hasta este punto, probablemente te interesó la propuesta, así que te invito a contactarnos y conversar acerca de cómo podemos mejorar la experiencia de los pacientes en conjunto!
